Si me viera en la obligación de elegir un solo momento especial en un show para quedármelo como un único recuerdo, mi mente viajaría rápidamente al pasado, en concreto al verano de 1996 y a la interpretación del clásico “All The Youg Dudes” por parte de David Bowie. El show de Alejandro Escovedo, acabo con el mismo clásico, y si bien está claro, que la interpretación no adquirió el carácter de legendaria, fue un final perfecto.
Antes de ese final, todo empezó con el no menos clásico “All The Way From Memphis”, poniendo al servicio de la Rant Band, un setlist que representaba la historia de Mott The Hoople y en menor medida de Ian Hunter en su etapa en solitario. Todo esto, bajo la batuta de Alejandro Escovedo, que, con mucha clase, no solo se limitó a desarrollar un setlist de leyenda, si no a darle el toque personal en sus interpretaciones, a pesar de restarle algo el tener que tirar de ipad para leer algunas letras.
Cuando la columna vertebral del show se basa en el álbum “MOTT (1973)”, poco puede fallar, y, es más, uno se pregunta ¿Cómo puede incluir un álbum tantos temas especiales? Así mismo, y al menos en mi caso, muchos de esos temas los he descubierto por las bandas de HardRock, cosa que hizo que me resultara imposible no imaginarme a Jack Rusell de Great White, cantando la coletilla de “Baby” que adorna el estribillo cuando sonó “Once Bitten Twice Shy”.
Pero Escovedo nos quería ofrecer una pequeña degustación de su repertorio propio, y la interpretación en clave Punk ya en el arranque del bis de su clásico “Chelsea Hotel 78” supo a gloria. Mentiría si dijera que controlo toda la discografía de Escovedo en solitario, pero lo que, si es cierto que “Real Animal”, su disco de 2008, es todo un clásico del rock americano de esencia Punk (imagino que Tony Visconti y Chuck Prophet, tuvieron mucho que ver). Con lo expuesto al inicio de estas palabras, poco podía fallara en un show que, aunque con algún momento menos inspirado, fue un ejercicio de auténtica nostalgia, A nuestro protagonista le podemos hasta perdonar, que lanzara unos cuantos “Visca el Barça”, en lugar de unos “Visca la Penya”.