A bullet in your heeeeeeeeeeead!
A bullet in your heeeeeeeeeeead!
You have got a bullet in your fucking head!
Así de contundente escupía su furia Zach De La Rocha y así de contundente fue el concierto que dieron Anx y V. en la Sala Upload el pasado sábado 5 de Noviembre. El impacto que me causó Bala fue demoledor. Tenía unas ganas enormes de escuchar esta bandaza en directo después de poner en loop el mejor disco nacional del 2021: Maleza. Por qué es así de simple, el disco que parieron es una demoledora descarga si concesiones que funciona en todos sus registros, en todos sus temas. En SPD han aparecido tanto en nuestros Cool5 como en lo mejor del año, sin duda se lo merecen. Con tanto hype por mi parte, debo confesar que me daba algo de miedo que el concierto me defraudara, ya se sabe que las expectativas son difíciles de cumplir. Qué pasó en la Upload? pues que Anx y V, V y Anx me destrozaron cuerpo y mente. En primer lugar porque son dos músicas absolutamente mayúsculas y, lo mejor de todo es que su honestidad, su actitud son reales, las ves a ellas y te puedes ver en ellas, en su música, porque son de l@s nuestr@s. Una banda de la gente, para la gente. UN LUJO.
A las 8 .30hs de la noche abrían hostilidades Rosy Finch. Debo reconocer que había escuchado poco su música aunque su imaginería lynchiana y su propuesta stoner, sludgy punk no me desagradó en absoluto pero me faltó tiempo y calma para adentrarme sen su Black Lodge y perderme en su propuesta.
Por desgracia llegué a medio concierto y digo por desgracia porque su puesta en escena, su música, que es lo importante me convenció totalmente. Comentaba con mi amigo que en directo ganaban mucho y es que es así.
Mireia Porto es el alma mater de este proyecto al que se le unieron Óscar Soler y Juanjo Ufarte en 2019. Este power trio es impactante y prometo darle el tiempo que requieron. Rosy, Finch, prometido.
Pero se mascaba en el ambiente que había ganas de Bala. Mientras tocaba Rosy Finch se mezclaron con el público para disfrutar del concierto, cercanas.
Y cuando se produjo el cambio de instrumentos la cosa empezó a caldearse de verdad. Después de que Rosy Finch dejara al público listo los nervios y la emoción se apoderaron de la sala.
Hasta que de Anx anunció que iban a hacer un poco de ruido. Y vaya si hubo ruido. Cuando Mi orden empezó a atronar tuve un momento de pánico, la banda empezó un poco fría y Agitar y su «Me has descubierto durmiendo con el deño fruncidooo!» sonó menos agresivo de lo que esperaba. Me lo estaba pasando muy bien pero no estaba sacudido por espasmos headbangueros. Pero poco duró esa sensación, es cierto que el sonido quizás no fue todo lo bueno que podría haber sido pero sinceramente no importó una mierda. Como ejemplo: V. hizo saltar literalmente el mazo del bombo en su percusión en Omertá (que sonó como una tromba de elefantes haciendo pogo sobre tu tumba). Y ahí estriba otra de las grandezas de la banda. Si V. es un torbellino punk, Anx da el contrapunto más comedido dando un equilibrio total a la banda.
Para esos entonces, el pogo reinaba en cada tema y la locura ya estaba desatada en la sala. Anxela nos recordaba lo duro que se hacía separarse de su hija y le dedicaba Bessie, la historia de Bessie Stringfield: motera afroamericana que rompió con todo. Ride Free, Bessie, Ride Free!
X, Cien Obstáculos, Liar o Rituais. La base del concierto era de Maleza pero quizás el momento más salvaje de la noche fue cuando invitaron a Mireia y las tres se marcaron LA versión de Territorial Pissings. Siempre ha sido mi tema favorito de Nirvana y en las manos de estas bestias fue absolutamente destroyer. Para los de abajo y para los de arriba. Tan fue así que V. saltó de su set para plantarle un besazo en los morros a Mireia. Punto, juego, partido.
De Lume, su segundo trabajo, me flipó colmillos y sobre todo Humo. Este último tema fue interpretado por Anx entre los asistentes generando la locura absoluta. Ya lo reza la canción: La cordura llega a su final. Y bienvenida sea.
V. se sinceró con el público por toda la energía que había sentido y todo el agradecimiento por la noche que habíamos pasado. Bala terminaron en el suelo abrazadas después de agradecer al público haberse volcado de esa manera…qué menos que dejarse cervicales, garganta y gemelos en la pista.
Creo sinceramente que este concierto lo voy a recordar por todo esto expuesto pero es que, además, poder charlar un rato con V. y Anx después del concierto con toda la tranquilidad fue el toque final a una grandísima noche.
Viva Bala, cagumrredeu!