La década de los 90’s tuvo dos partes muy diferenciadas, la primera donde explotaron todas las bandas y la segundo donde cayeron en el olvido, desaparecieron o directamente las maltrataron las discográficas. El caso de Rocket From The Crypt, es de libro, una banda independiente que ficha por una multinacional (interscope), y editan su obra maestra “Scream Dracula Scream! (1995)”. Se patean todos los escenarios y festivales (incluida una brutal actuación en la sala Zeleste de Barcelona, allá por 1996) y todo el mundo habla maravillas de ellos.
Pero cuando llega el momento de editar la continuación de su obra maestra, las tensiones, presiones, etc… provocan que “RFTC (1998)” se edite como marcado a no triunfar. A pesar del apoyo inicial de la compañía y editar los singles” Break It Up”, “Lipstick” y “When In Rome”, éstos no tienen la acogida esperada y les finiquitan el apoyo y en consecuencia el contrato, ya que prefieren centrase en otros sub productos de dudosa calidad que les aportan más beneficios.
Por supuesto, todo esto también generó problemas internos en la banda y algunos miembros saltaron de la misma. Pero qué queréis que os diga, para un servidor “RFTC (1998)”, es todo un digno y potente álbum, directo y a por faena, pero que incorpora en algunas de sus piezas (sobre todo en su segunda parte), arreglos de piano, voces femeninas y ritmos de percusiones, dotándolo de un punto algo diferente a su sucesor. Quizás la falta de un single de pegada potente o que los gustos estaban cambiando, el disco no se entendió en su momento por las generaciones del momento, es decir las de festivales como en Vans Warped, Family Values o el Ozzfest.
Después de ese álbum la banda se relajó a niveles de producción y ya en sellos independientes editaron una serie de referencias más. Aunque para el recuerdo queda el espectacular show del año 2001 en las fiestas de Santa Coloma de Gramanet bajo una potente lluvia con un Speedo gritando: “¡Es el esperma de Dios! ¡Es el esperma de Dios!”. A destacar el juego que le dieron al álbum en la gira de vuelta de la banda, al menos en su show de 2013 en Barcelona, hasta cinco temas rescataron del mismo, por lo que visto lo visto, la propia banda también lo aprecia.
Es cierto que no me impactó tanto como Scream… Pero es un discazo como la copa de un pino, más comercial y accesible pero igual de intenso y real!. Lo escuche hace un año o así y sigue so ando fresquisimo!