Cuando los Cuervos cantan, las Urracas mueren – Efectos colaterales del retorno de The Black Crowes

¿Qué opino del retorno de The Black Crowes bajo la fórmula Hermanos Robinson + mercenarios? Me la suda. Esta conclusión tan concluyente me auto-fustiga, pues la indiferencia ha alcanzado a una de las bandas capitales en mis 2 primeras décadas de vida, pero así están las cosas.

Ni me parece bien ni mal, allá Chris y Rich con sus negocios, ellos sabrán. Personalmente, en ningún momento me he planteado pelear por una plaza de AVLO para acudir al show Madrid. No me hace ilusión.

Si la reunión tuviese visos de estabilidad y/o se presentaran nuevas canciones, seguramente pensaría diferente. Pero para una gira nostálgica de «Shake Your Money Maker» no viajo. También es cierto que, ahora mismo, sólo viajaría por la saga Van Halen (VH/David Lee Roth/Sammy Hagar) y poco más.

La reconciliación de los Robinson Bros. ha tenido efectos colaterales, en el sentido que ha provocado la disolución/paralización de sus respectivas bandas. Y eso sí que me ha jodido más.

No por la Chris Robinson Brotherhood, que protagonizaron uno de los conciertos más soporíferos que he tenido que aguantar, 3 horas de aburrimiento total. Nunca conecté con la propuesta de esa formación y, de todas maneras, supongo que el fallecimiento de un pilar como era Neal Casal precipitó los hechos.

Eddie Harsch

The Magpie Salute. Esa es la gran pérdida de la ecuación. La joint venture de Rich Robinson, Marc Ford, Sven Pipien (tres Crowes) con John Hogg estaba dando unos frutos más que interesantes. Con un directo («Magpie Salute») y dos LP’s («High Water I» y «High Water II»), todos ellos de notable alto, lo que empezó como un proyecto colectivo improvisado -inicialmente ahí también estaba el añorado Eddie Harsch- había mutado en una banda estable.

El lanzamiento de «Omission» como saludo inicial de las Urracas asombró a más de uno. El único tema de estudio que contenía «Magpie Salute» (integrado por lo demás por versiones en directo de clásicos ajenos + «What is Home» y «Wiser Time» del catálogo BC) era la canción que llevábamos años esperando que saliese de la pluma de Rich.

.

No soy tan radical como OscarFS. Considero que «Lions», «Warpaint» o «Before the Frost … Until the Freeze» tienen grandes momentos, pero coincidimos en que ese progresivo acercamiento al folk y a la música tradicional americana les estaba amuermando en exceso.

Nunca entendí a aquellos que alabaron a «Before…» hasta situarlo como cúspide de su carrera. Siempre me quedaré antes con los The Black Crowes vitales, eléctricos y sureños, por lo que «Omission» supuso una gran bocanada de aire fresco para un servidor.

La buena respuesta generada por «Magpie Salute» -presa de los celos, Chris los etiquetó de «triste banda de tributo a The Black Crowes» … y optó contraatacar formando su propio tributo, As the Crow Flies!!!- llevó a la formación al estudio, donde dieron rienda suelta a su creatividad.

Ford, Robinson & Hogg

De esas sesiones se han publicado 24 canciones, repartidas entre «High Water I» y «II». La intención del combo era editar un disco doble con todos los temas, pero Mascot Records tuvo la vista de partir el material en dos discos. Me parece bien, prefiero pagar 15€ en 2018 y otros 15€ en 2019 por discos de 12 temas, que no 20€ en 2018 por un ladrillo de 24 canciones que difícilmente escucharé nunca en su integridad.

Ambos «High Water» contienen material de primera. No estamos ante los nuevos «The Southern Harmony …» y «Amorica», pero la química compositiva entre Rich, Ford y Hogg funciona en unos temas que son dignos herederos del legado Crowes. Sumergíos en ellos, vale la pena.

En 2018 se acercaron a nuestro país y demostraron la validez de su propuesta en directo. Yo salí encantado de su show en Razzmatazz 2. Un fenomenal concierto donde la banda brilló al interpretar el material propio y creó magia al revisar el catálogo de los Cuervos en la recta final del recital.

¿Y John Hogg? ¿Qué será ahora de John Hogg? Uno se imagina al mulato vocalista de vuelta al trapicheo de marihuana por las calles de Camden.

Salir de la versión móvil