I Love EVH. Respect On Streets!

Queda fuera de toda duda que Eddie Van Halen es una leyenda. Si bien, todo el mundo de la escena musical se ha manifestado con agradecimientos por la influencia que ha tenido sobre sus carreras musicales, etc… En USA la cosa va más allá y las muestras de respeto de las ciudades se dejan ver en homenajes en autopistas, pabellones o estadios deportivos, avenidas míticas como el sunset Strip de L.A. O en el Strip de Las Vegas, míticos locales como el Roxy, Whisky a Go-Go han rendido su respeto a Eddie en sus marquesinas.

Seguro que todos los que amamos el Hard Rock, tenemos nuestros momentos especiales con Eddie y la música de Van Halen, a mi me salen unos cuantos de cuando descubrí a la banda:
-Descubrir el primer álbum con apenas doce años de la colección de discos de tu hermano mayor.
-Quedarte fascinado con el niño fumando de la portada de 1984.
-La cinta de cassette de Marty McFly de Van Halen en regreso al futuro.
-No entender muy bien que los Van Halen de 5150 fueran los mismos que los de los seis primeros discos.
-Alucinar con las filmaciones en VHS del show del Us Festival 83 que ponían en un bar heavy de Barcelona.
-Escuchar «Beat It» y pensar que esa guitarra tenia un sonido familiar.

Todas esas primeras sensaciones, se vieron completadas una tarde verano de 1995 cuando por fin pude ver a Van Halen en vivo. Desgraciadamente la banda tocaba de día y sin show propio y presentando el disco más flojo de la etapa Hagar. Pero ver a Eddie tocando clásicos como «Ain’t Talk in About Love» , el solo intercalando «Eruption» o ver a todo un estadio saltando con «Jump» fue sencillamente fue perfecto. Solo un par de peros, Eddie no saco la guitarra roja rallada y el show duró solo una hora.


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