Lalo Salamanca («Better Call Saul»)

Lalo Salamanca, ¡qué hombre!

Jimmy McGill/Saul Goodman es un grande; Kim Wexler, aunque cero empática, es adorable; a Mike, cada vez más decrépito, se le quiere como un tercer abuelo; Gustavo sigue asombrando con su clarividencia; Nacho, el gangster de buen corazón, te hace sufrir … pero es inevitable, todos quedan eclipsados por Eduardo «Lalo» Salamanca.

El primo listo de la familia Salamanca, el clan que controla el Cártel de Juárez, ha sido el gran protagonista de la 4ª y 5ª temporada de «Better Call Saul» -precuela de la celebrada «Breaking Bad»-. Guapo, carismático, enrollado, asesino letal, ¡lo tiene todo!

Temporadas, por cierto, que me he pulido en poco más de 1 semana, con un dieta de 2-3 capítulos diarios. Mi relación de «Better Call Saul» es extraña. Puedo estar años sin acercarme a ella, aún a sabiendas de que se van estrenando temporadas, sin echarla de menos. Pero en cuanto me pongo, en seguida vuelvo a ser consciente de su grandeza y me casco maratones hasta situarme al día.

Jimmy McGill & Kim Wexler

No es una serie fácil. Yo mismo, al terminar la primera temporada, me planteé si realmente aquello valía la pena. Es decir, la calidad está fuera de duda, pero es que en esa temporada ocurre … ¿nada?

Es una rara introducción a la existencia de un Jimmy McGill -a años luz todavía de su transformación en el Saul Goodman que nos encandilaría en «Breaking Bad»- que, hablando claro, aburre.

En la segunda temporada entran en juego los retorcidos conflictos con su hermano Chuck y el interés crece, pero sigue siendo un show no apto para todos los públicos. Ingeniosa y brillante como pocas, pero también con fases densas y poco dinámicas.

Tío Hector con los gemelos Leonel y Marco

Es a partir de la cuarta temporada cuando los universos «Breaking Bad» y «Better Call Saul» empiezan realmente a colisionar y los personajes y tramas que marcarán el devenir de Walter White adquieren relevancia. Los sucesos se aceleran y el pulso se encabrita, justo lo que necesitaba la serie.

No es casualidad que no haya sido hasta ahora, recién finalizada la quinta temporada, que crítica y fans empiezan a proclamar que «Better Call Saul» está a la altura y oye, por qué no, por encima de «Breaking Bad».

Volviendo a los Salamanca, ¡vaya familia! Los implacables gemelos Leonel y Marco -que tantos dolores de cabeza darían a Walter White-, el chalado de Tuco, la rabia personificada del tullido Tío Hector. Menudos genes arrastran, los Salamanca. Aunque también sea una hiena sanguinaria, lo que diferencia a Lalo de sus primos son las neuronas.

Jimmy McGill & Tuco Salamanca

De hecho, el propio Vince Gilligan -creador de la serie-, reflexionaba en voz alta en una entrevista a Rolling Stone sobre que hubiera pasado si Lalo se hubiese cruzado con Walter White en «Breaking Bad»: «Walter las hubiese pasado canutas, no sé si hubiese podido con él«.

Por cierto, compruebo que Tony Dalton, el actor que da vida a Lalo -menudo acierto de casting … como en general, con todos los intérpretes de la serie-, protagonizó una serie mexicana bastante laureada y bien valorada, «Sr. Avila«, sobre un tipo que lleva una doble vida: vendedor de seguros y afable padre de familia vs. asesino a sueldo. Promete.

A quien le interese profundizar un poco en la figura de Tony Dalton en general y en la de Lalo Salamanca en particular, le recomiendo esta interesante entrevista concedida a Esquire.

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