Mandingo: la revolución de los cornudos.

¿Te has pajeado alguna vez imaginando a tu mujer follando con un negro?

¿Pagarías para que tu novia se comiera un rabo el triple de grande que el tuyo?

¿Tu mujer fantasea con abrir el culo para 5 morenos mientras tu grabas con una cámara de video?

¿Dejarías a tu mujer follarse a un extraño, que se corriera dentro de ella, y después comerle su sucio coño mientras se fuma un cigarro?

Si has contestado sí a todo cumples con el depravado perfil de lector de Sammy Plays Dirty.

Cada vez hay más hombres y mujeres uniéndose al movimiento Cuckold. Explicado de manera simple, el cuckold es un estilo de vida en el cual tu novia o mujer explora sus fantasías más salvajes con otros tíos con mejores penes que el tuyo.

El rol del marido cornudo es pagar por los servicios del llamado Mandingo o Bull -el profesional que se folla a tu mujer. Como buen cornudo vas a grabar videos de la follada, podrás depilar a tu esposa antes de la cita con el macho alfa e incluso meterás la picha en una especia de jaula de castrado que no te permitirá tener erecciones hasta que tu mujer quiera meter la llave para liberarte.

El cornudo disfrutando del show con la polla enjaulada.

El Bull o Mandingo suele ser negro -o afroamericano para los que ven racismo imaginario en todas partes- y su trabajo siempre es el mismo: darle a tu mujer su merecido en la cama.

Este profesional ofrece su cuerpo de emperador nigeriano con pollón de Ñu salvaje y se sacrifica para taladrar a tu cachonda esposa -todo por un módico precio.

El cuckold se limita a animar a su pareja mientras otro hombre con dotes superiores a las suyas revienta a su mujer. De esta curiosa y humillante práctica tanto el hombre como la mujer -y por supuesto, el Mandingo- obtienen placer y satisfacción.

Ya sea por la monotonía del matrimonio o por el deseo neofeminista de vengarse del machismo, la revolución cornuda ha crecido exponencialmente en la última década.

En internet puedes encontrar infinidad de webs y foros online dedicados a esta bonita afición, la cual no te va a dejar indiferente. La mayoría dicen sentir asco ante tales prácticas, pero luego en casa lo primero que hacen es buscar videos del tema con la polla en la mano -y el consolador en el coño.

Si tu marido traga no son cuernos.

La realidad es que cuesta mucho mantener el interés sexual en cualquier relación a largo plazo, y el estilo de vida cuckold no es más que una variante swinger más peculiar y extrema con la que animar la rutina.

Existe otra rama derivada llamada Cuckquean, un cuckold inverso en el que es el marido el que se folla a tías más buenas que su mujer mientras la esposa mira, graba y se masturba. A pesar de ser una práctica más minoritaria y underground, el Cuckqueaning no deja de ser interesante y ya hay muchas mujeres que se han dejado convencer. Espero que tu esposa se suba al carro.

La vida cuckold en realidad no tiene nada que ver con la homosexualidad, a pesar de que muchos acaben comiendo lefa de Mandingo. Se trata de buscar la excitación sexual a través de la humillación y del control de la mujer sobre el marido.

Son habituales las «breeding parties» o fiestas de impregnación, en las cuales un grupo de Mandingos se follan a tu mujer y la preñan, sin tu saber exactamente quien es el padre biológico.

Los cuckolds son dados a los juegos y a los retos propuestos por la mujer. Ella pone las reglas y le ordena lo que tiene que hacer. Entre las cochinadas más impactantes de los cuckolds, me han llamado la atención las siguientes:

Esto se llama «Fucklicking», comer culo y pelotas mientras tu mujer folla.

Te debes estar preguntando cual es el mejor sitio para iniciarte en el universo cuckold.

Resulta que hay ya cientos de clubes Mandingo por todo el mundo, la gran mayoría de ellos en Estados Unidos. En España de momento vamos justos de fiestas cornudas, por lo que tendrás que tirar de foros para encontrar gente del mundillo.

A continuación, te dejo un documental muy interesante. Cuenta la historia de una empresa de Mandingos americana, «The Florida Mandingos«, donde puedes ver desde dentro esto del cuckold y decidir por ti mismo si es el estilo de vida que deseas para ti y para tu mujer.

Si por el contrario eres de los que te gusta más la idea de acostarte con las mujeres de otros, el docu también te resultará inspirador. De todo se puede hacer negocio, y ganarte la vida follandote a casadas mientras sus maridos cornudos están atados a una silla es cuanto menos original!

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