Decidimos tirar adelante y publicar «House of Noise» en un periodo de extrema turbulencia para todos en todo el mundo. Después de días de debate interno, llegamos a la conclusión de que la gente necesita la música y necesita algo positivo en lo que focalizar durante estos días oscuros.
Por supuesto podríamos haber pospuesto el lanzamiento, pero pusimos nuestro corazón y nuestra alma en este disco y sentimos que debía ser publicado ya, con la esperanza de que ayudaría a levantar los ánimos de nuestros fans, y quizás los de que todavía no lo son.
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Así es. Massive Wagons podrían haber congelado la publicación de su nuevo LP, «House of Noise» y haber esperado tiempos mejores, pero tal como indican en el texto que incluyen en el interior del digipack -aquí no hay libreto- y que os he reproducido al inicio del post, sufrieron un ataque de responsabilidad social que les llevó a respetar el calendario previsto.
Teniendo en cuenta que la música hoy en día se consume por Internet -y los que todavía compramos físico lo hacemos muchas veces a golpe de ratón-, ¿para qué hacer esperar a los fans?
Aquí no son nadie, su nombre ni siquiera suele aparecer en los medios especializados, pero en Gran Bretaña Massive Wagons son muy queridos. Es una formación que arrastra una importante legión de fans -importante para un estilo que, salvo The Darkness y otras pocas excepciones, lleva un par de décadas en segundo plano … no hablo de éxito mainstream, por supuesto-.
El quinteto de Lancaster son unos héroes de la clase trabajadora, una banda del pueblo que ha caído en gracia con su música repleta de optimismo y buen humor. En tiempos oscuros, bufones como Baz Mills -su líder- son más necesarios que nunca. Salvando las distancias, me gusta considerarlos unos Slade del s.XXI.
Tras la repercusión de su predecesor -«Full Nelson» (2018)- «House of Noise» era un disco muy deseado. Así que, como dije antes, ¿para qué hacernos esperar?
«In It Together» y «Bangin In Your Stereo». El álbum empieza con dos apoteósicas dosis de arena rock, puño en alto, que contienen unos mensajes inequívocos: Con Massive Wagons, quienes, por cierto, son los putos amos de tus bafles, nunca caminarás solo.
A continuación, «House Of Noise» y «Freak City» muestran la cara más comercial y estribillera de la banda (¿alguien dijo Eurovisión?), pero acto seguido la cosa se pone cafre con «Hero», una pedrada hard que les retrotrae al sonido más rudo y bullicioso de sus inicios -su primerizo «Fire It Up» (2011) vuela los sesos a todo rockero ortodoxo que se le acerca-.
La obligación de mantener el volumen al 11 continúa con «Professional Creep», «Pressure» y «The Curry Song». El primer y tercer corte se emparentan con los Terrorvision más duros, mientras que en «Pressure» practican el arte de las «mil-canciones-en-una» que The Wildhearts dominan con tanta maestría.
«Glorious», «Sad Sad Song», «Hallescrewya» retoman la senda más festiva y accesible, con la infalible fórmula de estrofa peleona + estribillo para todos los públicos coreable hasta la extenuación. No es su faceta que más me gusta, pero Massive Wagons en 2020 son así. Lo tomas o lo dejas.
La lograda power ballad «Matter of Time», de elegantes y sentidos solos (sí, hay varios), cierra una colección ideal para seguir fantaseando con futuros tiempos mejores donde el nuevo Rocksound abrirá sus puertas y Massive Wagons -que no tocarán allí por qué se les quedará pequeño- traerán su carnaval rockero a nuestra ciudad.
