Solos (Parte I)

«Hotel California», «Free Bird», «Comfortably Numb», «Purple Rain» … ¿qué común denominador tienen estos clasicazos de Eagles, Lynyrd Skynyrd, Pink Floyd o Prince?

Exacto, todos ellos cuentan con un solo «bigger than life».

El riff mola, pero a cualquier guitarrista con un dominio mínimo de su instrumento se le puede aparecer la Virgen y pergeñar un riff resultón.

El solo es harina de otro costal. El solo es la sublimación del arte guitarrero y no es terreno para begginers. Y únicamente los cracks te pueden componer un prolongado desarrollo de guitarra que emocione y/o destroce cervicales y encima encaje coherentemente dentro de la canción.

Desde Sammy Plays Dirty, en diferentes entregas e intentando huir de los top 10 que encontrarías en cualquier lista, te presentamos una serie de solos que te harán sacar ipso-facto la air-guitar del armario. Enjoy!

Heathen – «Set Me Free» (1987)

Que en cuestión de tres años dos bandas, separadas en lo geográfico por el océano Atlántico pero también en lo estilístico (heavy metal versus thrash metal), hiciesen una versión de un mismo tema (de autoría desconocida para mí) me chocó bastante en su momento. Y es que, en mi cerebro de 13 años, tal cosa sólo podía significar dos cosas:
1. «Set Me Free» era un clásico y
2. aún me quedaba mucho por aprender.
Las bandas en cuestión eran Saxon y Heathen, y los homenajeados: Sweet.
De las tres versiones que conozco he escogido la de la banda de Lee Altus (actual guitarra en Exodus) porque es la que tiene un solo más largo; pero cualquiera de ellas asegura unos segundos inolvidables de digitación.

Lo chocante es que, tanto entonces como ahora, «Set Me Free» (la original) es un tema que sólo conoce una selecta minoría de rockeros. Craso error, pues ya en su versión primigenia (hablamos de 1974) era un auténtico pepinazo metalero (ya por entonces Sweet les daban sopas con honda a Judas Priest y su «Rocka Rolla» tanto en imagen como en sonido).

Judas Priest – «Stained Class» (1978)

Y hablando del Sacerdote Judas… Qué difícil es escoger un solo dentro de su colosal obra. Por eso mismo, por esa dificultad, no escojo uno, sino dos solos: los que aglutina el tema-título «Stained Class» en el minuto 3’33» y en el minuto 4’35». Madre mía, qué clase tienen Downing y Tipton…
Podría haber escogido, ya digo, varias docenas más, pero nunca está de más recordar un tema (y un disco) tan olvidado como éste. Todas las etapas de la banda son dignas de un monumento, pero, qué quieres que te diga, siento debilidad por los últimos años de la década de los 70s («Sin After Sin», «Killing Machine», «Unleashed In The East»,… canela fina).

KISS – «Detroit Rock City» (1976)

Junto con «Beat It» de Michael Jackson + Eddie Van Halen, éste de KISS fue uno de los primeros solos que me iniciaron en el arte del air guitar durante mi tierna infancia. Lo curioso es que ambos discos entraron en mi hogar el mismo día (es más, fueron los primeros LPs que, mi hermano mayor y yo, nos agenciamos por voluntad propia).
La 1ª y la 2ª ley de lo que debe ser un solo molón son, respectivamente, que sea tarareable, y que sea infeccioso; y que me aspen si el solo del tema que inaugura «Destroyer» no los cumple a pies juntillas.
Lo gracioso del asunto es que Ace Frehley simplemente se limitó a ejecutarlo; su composición es obra y gracia del productor Bob Ezrin.

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