Estoy seguro que los actuales fans de la música de Red Hot Chili Peppers, asocian el nombre de Dave Navarro al de un presentador de un «reality» de tatuadores molones y sufriendo por buscar el diseño perfecto. No los culpo, el propio guitarrista se ha trabajado ese «status» a conciencia, en un papel que es absolutamente odioso y ridículo, pero que a los nuevos «teenagers» repletos de tatuajes seguro que les encanta.
Pero bueno, aquí no estamos para convencer a nadie de lo que tiene que hacer, si no para contar nuestras cosas, que pueden interesar más o menos. Retrocedamos a 1995, año en el que se edita «One Hot Minute» de unos Red Hot Chili Peppers que llevan un año con Dave Navarro y que ya están preparados para otra nueva etapa.
Visto con el tiempo, la alianza no funciono muy bien, aunque para un servidor, quitando la primera etapa Frusciante es la que más me interesa cuando quiero acercarme actualmente a RHCP. Sin duda, es una etapa oscura, llena de jeringuillas, sustancias e influencias de unos y otros. Navarro venia del Hardrock cargado de ritmos alternativos que daban la mano a los de los setenta, y el resto del Funk, aunque la alianza era algo más que musical, los vínculos de la escena de LA estaban presentes, por no hablar de los hábitos que compartían.
Pero bueno, el álbum ya lo ha escuchado todo el mundo y hablado hasta la saciedad. El objetivo de estas lineas es hacer referencia a las caras B de los singles del álbum, que al menos para mi superan a muchos temas del álbum, dando la sensación de que los parieron con menos presión y por lo tanto fluyeron mejor. Servidor en Agosto de 1995 estaba paseando por Oxford Street de London, era un día antes del Reading Festival y en la famosa calle todavía encontrabas tiendas de música, sin ir más lejos un Tower Records.
«Warped» aprovechó la tirada de los festivales europeos, para publicarse como single, las tiendas estaban cargadas de publicidad del lanzamiento y servidor cayo en la tentación. En un formato tan obsoleto actualmente como el el CD single, me hice con una copia de «Warped», nuevo oscuro y guitarrero single. «Melancholy Mechanics» es el tema que se incluye en el single y que no formo parte del álbum, una pieza de aires a lo Porno For Pyros (colabora Stephen Perkins) y que explota en ciertos momentos del tema, claramente un ejercicio noventero, pero con una calidad deliciosa.
El segundo single elegido, fue «My Friends» posiblemente sea el peor tema del disco, cosas de la compañía. En su versión single de 12″ en su cara B incluye «Let’s Make Evil», de desarrollo sucio y guitarra gruesa, con aires de local de ensayo, pero a la misma vez de himno que si lo hubieran trabajado más seria un clásico. «Stretch» es puro funky, podría ser un tema de Fishbone o de Infectious Grooves en plena Jam com Sly Stone. Navarro aplica mucha clase en su guitarra y la parte rítmica es exquisita, que junto a las melodías vocales den en lo que es posiblemente el camino que debían haber seguido.
Pero bueno, esa etapa finalizo entre 1997-98 cuando la banda con nuevas ideas tenia que empezar a ensayar par un próximo disco, pero entre problemas personales, ego y la continuidad de la espiral de drogas todo se fue a la mierda. De los RHCP a partir de de ese momento prefiero no saber nada.