13 Bitchin’ New Songs guaranteed* to get you laid, supercharge your party & make you laugh (*totally not guaranteed, but it might help)
13 canciones de puta madre que te garantizan* pillar cacho, revitalizar tu fiesta y hacerte reir (*no del todo garantizado, pero podría ayudar)
Esa es la frase incluida en la pegatina que viene pegada en el celofán del nuevo disco de Steel Panther y, vaya, define a la perfección lo que nos encontramos en sus surcos.
Recuerdo leer una crítica de «On the Prowl» en la web de Classic Rock -creo que le cascaban 1 estrella sobre 5- donde dejaban al álbum por los suelos, rajando especialmente sobre la faceta lírica de la banda. ¿En serio? ¿A estas alturas?
Supongo que los que no somos angloparlantes nativos partimos con ventaja. Escuchar canciones plagadas de cocks, pussies, blowjobs y demás, una tras otra, no nos ofende. Al contrario, les da un plus.
Si Steel Panther cantaran en castellano, quizás títulos como «Nunca es tarde para pillar un coño», «¿Te basta con mi polla?» o «Vagina mágica» nos sonarían ridículos. Pero como no es el caso, que se les den a los haters.
A estas alturas ya te lo sabrás de memoria. No es exactamente una novedad -ya circula desde hace unos meses- y quien tenía que escucharlo ya lo habrá disfrutado. Pero por si acaso, por si te has despistado, ahí va un toque de atención.
No estoy cualificado para determinar si sus dotes humorísticas están más afiladas o chabacanas que nunca. Pero que te decía, que más da. Lo que importa es que, a nivel compositivo, a nivel sonoro, las canciones son tan o más cojonudas que de costumbre. ¿Y la portada, qué me dices de esa alucinante portada?
Guitarras de fantasía y estribillos superlativos, teletransportarme a 1987 con composiciones a la altura de lo que se cocinaba en esa era, eso es lo que le pido a Michael Starr, Statchel y compañía. Y en eso, van sobrados. Pasan los discos y el nivel no decae.
Steel Panther, en la actualidad, se autoproducen y se autoeditan. Así están las cosas en estos pseudo-medievales tiempos de la cancelación. Otro aliciente más para, desde las barricadas, desde la resistencia rockandrolera, apostar por «On the Prowl».
